sábado, 21 de enero de 2017

El videoclip II: Recursos e ideas

El videoclip es un género audiovisual muy agradecido. Es, en mi opinión, una de las disciplinas más interesantes porque permite una libertad creativa superior a la publicidad, la televisión o el cine. Podemos idear un videoclip como si fuera una pieza informativa, al igual que hicieron REM con su tema Bad Day.
 Este tipo de pieza ha sido utilizada hasta la saciedad. Tanto, que ya constituye un subgénero dentro del género. Ahora mismo, se me ocurren dos ejemplos:

El primero de ellos es Jaime Urrutia, que utilizó este recurso para su tema “Qué barbaridad”.
El otro ejemplo (sin salir de la escena musical española) es “Mentiras” de Tote King.
 (YouTube no me deja incrustarlo en este post, así que lo podéis ver pinchando aquí).

Otra opción muy interesante a la hora de realizar un videoclip son las animaciones. Uno de los mejores, dentro de este tipo de piezas, es “Do the Evolution” de Pearl Jam.
La estética del cómic predomina en “Do the Evolution” haciendo de este videoclip un ejemplo de cómo conjugar música y animación de forma efectiva.

"Do the evolution" me recuerda, en cierto sentido, a “The Wall” de Pink Floyd que, a mi parecer, es una obra maestra que no te puedes perder. Se trata de toda una película en la que el disco homónimo ejerce, no solo de banda sonora, sino de vehículo para trasladarnos a la historia que nos cuenta. Todo ello, mezclando animación con actores reales. Imprescindible si te apasiona la música de los Pink Floyd. Pincha aquí y deléitate.

Sin salirnos de las animaciones, uno de los videoclips que más me han sorprendido últimamente ha sido este de Strugill Simpson, con su particular versión del “In bloom” de Nirvana. La originalidad de la versión y el manejo de los recursos audiovisuales merecen echarle más de un vistazo.



Pero una de las posibilidades que ofrece el videoclip es la interactividad. Si en este post (de hace unos cuantos años) hablaba de Labuat y su videoclip interactivo “Soy tu aire”, Bob Dylan sacó esta curiosa pieza audiovisual con su mítica canción “Like a RollingStone”.
En este vídeo, podemos cambiar de canal con las flechas del teclado y observar cómo los rostros más conocidos de la televisión americana se prestan a cantar el tema mientras presentan un informativo, actúan en una serie o participan en un programa de cocina. Si observamos los créditos, podemos hacernos una idea del trabajo que puede implicar una pieza audiovisual de poco más de seis minutos.

 Como hemos visto, el videoclip permite experimentar con otros géneros, explorar conceptos diferentes o instaurar subgéneros dentro de sí mismo. Además, ya no hacen falta presupuestos elevados para realizar un videoclip resultón, sino que prima más una idea original que un formato preconcebido y limitado a la mera promoción.